Tanto sus estancias, como su zona wellness, transmiten una elegancia sin pretensiones y la belleza imperfecta propia del paso del tiempo. Ahora entenderás por qué me gusta tanto. Te aseguro que es más que una casa rústico-moderna, su interiorismo se basa en toda una forma de vida y es ahí donde radica su autenticidad. Sencillez y naturalidad son sus rasgos más característicos, dando lugar a ambientes relajados y llenos de calidez.
Los materiales nobles, como la piedra, el cemento, el bambú o la cerámica, los textiles de algodón o lana, los tonos neutros, las formas simples, las líneas puras y las imperfecciones son sus señas de identidad. Por eso, aunque cada apartamento tiene su propia personalidad, en todos ellos puedes encontrar muebles de madera, piezas artesanales, plantas, antigüedades, lámparas de fibras… e, incluso, alguna obra de arte. Estarás conmigo en que no se necesita mucho más cuando lo que se busca es crear espacios llenos de paz y equilibrio. Ya ves que no se trata solo de un estilo decorativo, sino que es toda una filosofía y SOLO Palacio es un buen lugar donde inspirarte para incorporar la decoración wabi sabi a tu casa. Y, ¿sabes qué es lo mejor? Algunas de sus piezas puedes encontrarlas en mi shop online y en mis tiendas de decoración.