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Parece que la primavera se ha adelantado y nos regala unos días de sol para terminar las últimas semanas del invierno. Este es el momento en el que empiezo a pensar en el cambio de armario, también en cómo decorar la terraza. Es ahí donde disfrutaré de desayunos calmados o de un café a mitad de mañana, de lecturas mientras tomo el sol y también de comidas y cenas con familiares y amigos. Los espacios exteriores dan mucha vida a la casa, ya sea una terraza amplia o un balcón. Creo que siempre merece la pena disfrutar de estos espacios y estos meses son la época perfecta ahora que el calor aún no aprieta.
Antes de pensar en los muebles de exterior, los textiles o la iluminación, siempre llevo a cabo lo que conocemos como limpieza de primavera. Es cierto que resulta un trabajo bastante aburrido, pero también lo considero muy necesario e, incluso, hay estudios que lo consideran una buena manera de eliminar el estrés. A mi desde luego el resultado me merece la pena. Me aporta mucha paz empezar a preparar mi terraza para esta primavera con el espacio limpio y los desperfectos, que puede haber ocasionado el invierno, arreglados.
Una vez terminada esta tarea, viene mi parte favorita, amueblar. Los muebles de exterior son claves para hacer de tu terraza un espacio cómodo y funcional. Para ello es imprescindible que pienses, no solo en el espacio disponible, sino también en qué uso le quieres dar. No es lo mismo decorar un pequeño balcón, donde disfrutar un té con un libro al aire libre, o tener un espacio de tertulia con amigos o apostarlo todo a una terraza chill out. Es importante que el mobiliario de jardín se adapte a los metros disponibles, de modo que haga la zona más agradable sin sobrecargarla. En mi caso, mi espacio me permite crear un salón exterior, donde disfrutar de una sobremesa, una cena de picoteo y, sobre todo, una buena conversación. Un conjunto de ratán con sofá, sillones y mesa es mi mejor aliado para conseguirlo. También he seleccionado algunos muebles auxiliares que permiten que el espacio sea más versátil. Si optas por muebles para la terraza de materiales ligeros, como las fibras vegetales, será más fácil conseguirlo. Además, aportan un toque natural y contribuyen a mantener la circulación del aire.
Para hacer de tu terraza una de las zonas más acogedoras de tu casa, no te olvides de tres elementos: los textiles, las plantas y la iluminación. Los textiles tienen la capacidad de incrementar la calidez y crear sensación de hogar sólo con su presencia. Los cojines aportan color y confort. Una manta es fundamental, si decides disfrutar de tu terraza a primera hora de la mañana o a la caída de la tarde. Las alfombras dan una segunda oportunidad a esos pavimentos que están algo deteriorados y también permiten extender la zona de disfrute si, además, le añades unos cojines de suelo.
Igual que no te imaginas una primavera sin flores, no renuncies a ellas a la hora decorar tu terraza con plantas. Crean un ambiente lleno de naturalidad y frescura, además de ayudar a conseguir privacidad, por no hablar de su alto poder decorativo. Recuerda que si no se te dan muy bien, siempre puedes optar por flores artificiales o secas. Además no tendrás que preocuparte por regarlas cuando te vayas de vacaciones.
A mí me encanta disfrutar de mi terraza no solo durante el día, sino también por la noche, especialmente cuando sube la temperatura. Con una iluminación cuidada tendrás un ambiente muy agradable y, si lo refuerzas con iluminación indirecta puede ser hasta mágico. Las velas, faroles, candelabros, lámparas de mesa, te ayudarán a conseguirlo y son elementos que puedes utilizar también en el interior cuando termine el verano.
Estoy deseando que llegue la primavera. Para mí es un auténtico lujo poseer una terraza donde descansar y desconectar. Por eso, no dudes dedicarle un tiempo para decorarla, por pequeña que sea. Personalízala en función de tus gustos y usos, aprovecha estas semanas para poner a punto tu terraza y conviértela en el lugar favorito de tu casa.