Los materiales naturales y orgánicos son un elemento clave en la decoración de interiores y fundamental si quieres crear un hogar más saludable. Además las piezas basadas en estos materiales son atemporales y se adaptan con facilidad a tu estilo. A su marcado carácter estético, se suma su toque fresco y acogedor.
Cuando pensamos en este tipo de materiales inevitablemente nos vienen a la mente los muebles, pero también los descubrimos en revestimientos, textiles, menaje y objetos de decoración. El mármol, la cerámica, el barro, el mimbre,... son habituales en la vajilla y todo tipo de accesorios de menaje, hasta en espejos, macetas y revisteros. Las fibras vegetales como el yute o el algodón aparecen con frecuencia en los textiles, alfombras, cojines, manteles, tapizados,... y también en la iluminación, gracias a que son fáciles de trabajar por su flexibilidad y resistencia.