Hay momentos en la vida que no cambiaría por nada del mundo. Desayunos, brunchs, meriendas… ¡No te imaginas lo bien que me sientan! Tanto si estoy sola en casa como rodeada de amigos y familiares, siempre trato de darles un toque muy especial. Para mí, resultan ser muy agradables y, sobre todo, me alegran cualquier mañana o tarde de la semana.
Es cierto que pueden parecer triviales; al fin y al cabo, forman parte de nuestra vida cotidiana y, con las prisas, tendemos a olvidar los beneficios que pueden aportarnos. Pero te aseguro que, con un poco de mimo y mucha chispa, estas comidas informales son una excelente forma de mejorar tu estado de ánimo y tu bienestar general.
A mí, personalmente, me encanta añadirles una buena dosis de creatividad. Y para ello, siempre encuentro los mejores recursos en la decoración y concretamente, en la vajilla que elijo para acompañar las ensaladas, las tostas e incluso los croissants … Elijas lo que elijas, siempre será mucho más exquisito si lo envuelves en originales diseños.
¡Qué atractivos! Los modelos Guatapé y Evora son mis favoritos para darle una vuelta de tuerca a los desayunos y meriendas. Dos vajillas originales e imprescindibles para el día a día cuyos tonos, formas y texturas animan el ambiente y hacen las delicias de todos.