Este verano he tenido un flechazo en Menorca. Esta isla transmite la esencia del estilo mediterráneo, con su vida lenta, centrada en dar protagonismo a las cosas pequeñas de la vida. No me extraña que sean muchos los arquitectos, interioristas o artistas que han decidido afincarse aquí. No solo por su belleza sino porque las casas de los centros históricos de Mahón y Ciutadella son auténticas joyas. En ellas, es fácil alojarse, desconectar o, incluso, encontrar inspiración para decorar el hogar. Casa Telmo es un buen ejemplo de esto. En ella se respira una estética muy particular gracias a su respeto por el pasado y su estilo ecléctico y muy personal. ¡No puede gustarme más!
Esta antigua casa señorial de estilo inglés fue concebida por Quintana Partners. Este estudio te resultará familiar porque también fueron los encargados de diseñar La Bionada, otro hotel boutique, enclavado en la Costa Brava, del que te hablé hace unos meses. El concepto de diseño de este singular alojamiento gira en torno a Sir Telmo, de ahí su nombre, un explorador ficticio que recorrió el mundo antes de descubrir esta encantadora isla. En consecuencia, sus únicas 5 habitaciones representan una parada en su itinerario, que va desde una cabaña africana hasta una casa rústica de campo británica. De tal modo que cada una tiene una personalidad diferente y marcada.