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Siempre he sido una apasionada de cuentos y desde que lo leí por primera vez, Peter Pan ha sido mi favorito. Durante toda la infancia soñaba despierta con “El país de Nunca Jamás”, esa isla lejana y exótica donde pasaban las más maravillosas aventuras.
Foto de ActivaTalento
Nunca hubiera sospechado que iba a encontrar en el mundo real algo tan espectacular como esa isla creada en mi imaginación, hasta que descubrí: The Rock Restaurant.
En una de las más espectaculares playas de Zanzibar, Pingwe, se encuentra este peculiar restaurante, encaramado en una roca y alcanzable andando o en barco, según la marea.
Foto de Hot Shop Media en DailyMail
Inaugurado en Julio del 2010, The Rock Restaurant se ha convertido en los años en una de las etapas fundamentales si estás visitando el país. Originariamente, una estructura muy básica, hospedaba el puesto de un pescador, pero actualmente se ha convertido en un fabuloso restaurante gestionado por una empresa local de residentes en el pueblo de Michamvi.
Foto de Hot Shop Media en DailyMail
El sitio está decorado de manera simple y acorde al estilo de la isla, cuenta con pocos cubiertos y un área lounge en la terraza exterior donde poder disfrutar de un aperitivo con una de las mejores vistas del Océano Índico o de un cocktail bajo el cielo estrellado de las noches africanas.
Foto publicada en Pursuitist
La propuesta gastronómica es una mezcla entre cocina italiana y platos locales, probablemente la mejor oferta de pescado de Tasmania. En la mayor parte de los casos el pescado se pesca directamente en las aguas alrededor del restaurante, las verduras crecen en los campos cercanos y la pasta es home made.
Foto publicada en Travel Away
No te prometo que vayas a encontrar Campanilla, pero estoy segura de que visitar The Rock Restaurant será una de las mejores experiencias de tu vida.
Foto publicada en Travel Away
Tu casa también puede convertirse en una isla paradisiaca donde perderse. Estas son algunas pistas, inspiradas en la naturaleza, para llegar hasta ella.
1. Cuenco de madera Cook Island, su interior en resina policromada con estampado vegetal no deja indiferente. Puedes usarlo en tu cocina como fuente de pan o en tu salón como objeto decorativo. 2. Botellas Mazuelo, la combinación de cristal transaparente con una base de revestimiento entramado de mimbre te transportará a un entorno natural. Puedes combinar sus distintos tamaños y crear un bonito conjunto decorativo añadiendo algunas flores y plantas. 3. Silla Santorini, un toque exótico en tu salón o terraza con este asiento de caña. 4. Espejo Eir, su doble marco en forma de sol se inspira en formas de los 60 y 70 que aporta un toque vintage. 5. Vaso Chantilly y copa Chantilly, sus formas cónicas con relieve en canalé y cenefa superior da un toque distinguido y diferente a tu mesa. 6. Bandeja Koh-Kood, su original ilustración tropical lo convierte en un accesorio de menaje tan práctico como originial.
